Huatay, de 74 años, es la más importante dirigente excarcelada del
proscrito Sendero Luminoso. Con gafas oscuras y cubriéndose el rostro con una
bufanda, abandonó la prisión Ancón II, 40 km al norte de Lima, en un vehículo
particular, observó un periodista de la AFP.
Cuando cayó en manos de la policía antiterrorista, en octubre de 1992,
era considerada como la sucesora del jefe histórico de la guerrilla, Abimael
Guzmán, por ser en ese momento la única integrante libre del estado mayor de
Sendero Luminoso.
En una carta a la que tuvo acceso la AFP, Huatay relató que está “inválida, no puedo caminar”, una situación que atribuye a
que “fui torturada cruel y brutalmente” por la
policía. Su estado se agravó, alega, “por las
condiciones de prisión y la falta de atención médica”.
En la parte posterior del vehículo que la trasladaba se apreciaba una
silla de ruedas, según imágenes de televisión. Huatay dejó la prisión en medio
de la presencia de numerosos periodistas.
Socorro Popular era un grupo de fachada de abogados que defendía en los
tribunales a los guerrilleros detenidos, además de brindar apoyo logístico para
los atentados que cometía Sendero Luminoso, según las autoridades peruanas.
Huatay siempre negó pertenecer a Sendero y sostuvo que integraba la
denominada Asociación de Abogados Democráticos.
Huatay fue excarcelada un mes después de la liberación de la bailarina
Maritza Garrido Lecca, quien cumplió una condena de 25 años tras ocultar en su
academia de ballet a Abimael Guzmán y caer presa junto con él en septiembre de
1992.
El líder de Sendero Luminoso, agrupación considerada terrorista en el
país, cumple una condena a perpetuidad en una base naval.
Dirigentes políticos afirmaron que Huatay fue liberada sin haber pagado
al Estado una reparación civil solidaria que le impuso la justicia a los
integrantes del alto mando de Sendero Luminoso, que asciende 3.700 millones de
soles (1,1 millones de dólares).
El conflicto que desató Sendero Luminoso dejó, entre 1990 y el 2000,
cerca de 70.000 víctimas, según un informe de la Comisión de la Verdad y
Reconciliación.
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